Entran en vigor los "aranceles recíprocos" anunciados por Trump que han desatado una guerra comercial global

"Aranceles recíprocos"

El cálculo de estas imposiciones se reduce a dividir la balanza comercial que tiene EE.UU. (las exportaciones menos las importaciones) entre el total de las importaciones realizadas en un mercado concreto, multiplicado por 100 para poder formularlo con un porcentaje. El resultado obtenido se divide entre dos y, una vez obtenido el número redondeado, esa será la tasa arancelaria que aplicará a los países.

El ministro español de Economía, Carlos Cuerpo, calificó de "arbitraria e injusta" la metodología de cálculo utilizada por la Administración Trump para fijar los aranceles a los distintos países. Durante su comparecencia puso como ejemplo el caso de Lesoto, que ha acabado con el arancel más alto, un 50%. Este es un país africano en desarrollo "muy vulnerable" y que no importa nada de EE.UU. porque es un país pobre y, por lo tanto, tiene un elevado déficit comercial en términos relativos.

La UE será gravada con un arancel del 20%, que afectará a dos tercios de las exportaciones comunitarias de bienes hacia territorio estadounidense. Las ventas de bienes suman un valor conjunto de unos 370.000 millones de euros. Su impacto será mayor en sectores como los automóviles, la maquinaria, los aviones o el acero, entre otros.

Hay que matizar que, de los sectores mencionados, el automóvil y el acero de la UE sufrirán un gravamen del 25%, al igual que el resto del mundo. Los demás sectores se verán gravados con un arancel del 20%. En el caso de estas medidas, Trump busca castigar a su socio comercial más relevante, ya que la UE es el principal destino de las exportaciones estadounidenses y, por otro lado, EE.UU. es el cliente primario de las ventas europeas.

Bruselas impulsa un plan de acción sobre el acero en pleno pulso comercial con Estados Unidos

Fuera del alcance de estos "aranceles recíprocos" quedan bienes y materiales como el cobre, la madera o los productos farmacéuticos. Casualmente, estos son los sectores que aglutinan la mayor parte de las ventas europeas a los EE.UU. Según fuentes comunitarias, este gravamen afectará a 290.000 millones de euros en exportaciones, a los cuales hay que añadir los 50.000 millones de las exportaciones de vehículos automóviles y piezas de recambio y otros 16.000 millones en ventas de acero y aluminio.

Si se mantienen las ventas del año pasado, la suma de todos los valores afectados y teniendo en cuenta las imposiciones sobre estos bienes, los aranceles recaerán sobre algo más del 67% de los productos exportados hacia la economía estadounidense.

Países más afectados de la UE

Irlanda, Alemania e Italia son los países miembros de la UE que más exportan a EE.UU. Irlanda vende al país norteamericano un 32,5% y, Alemania e Italia, el 10,4%. De los 27 países miembros de la UE, 20 tienen superávit comercial con EE.UU.

Los siete restantes cuentan con un déficit, entre ellos España, pero también Malta, Luxemburgo, Chipre, Eslovenia, Polonia y, sobre todo, Países Bajos, que importa casi 25.000 millones más de lo que exporta.

El principal perjudicado con estas tasas es Alemania, que es el quinto proveedor de coches para los estadounidenses, por detrás de México, Corea del Sur, Japón y Canadá. La industria automovilística germana es la responsable de dos tercios de las ventas comunitarias totales de coches. En 2024 estos intercambios se tradujeron en más de 25.000 millones de euros de ingresos.

Otros bienes que exporta la UE a EE.UU., y que podrían verse afectados, son los aviones, cuyas ventas a aerolíneas estadounidenses se estarían recuperando después de la pandemia de la COVID-19, pero con esta medida la tendencia podría revertirse. Por otro lado, la venta de motores y máquinas mecánicas se vería perjudicada, especialmente en el caso de Francia y Alemania, que colocan allí más del 25% de su producción, aunque el peor parado sería Polonia, que vende casi el 35% de su facturación.

Por último, Trump llegó a amenazar con imponer un arancel del 200% a las bebidas alcohólicas europeas si Bruselas gravaba al whisky como represalia por sus tasas. Hasta el momento estos productos, que en 2024 aportaron casi 9.000 millones de euros a la economía de la UE, sufrirán el arancel general del 20%. Es un golpe al sector que impactará especialmente en Francia, Italia, Irlanda, Países Bajos y Suecia, para quienes Estados Unidos es el primer destino de sus productos alcohólicos, más del 20% de sus ventas y hasta un 38% en el caso irlandés, gran suministrador precisamente de whisky.

Posible recesión

Debido a la imposición de estos aranceles y a la amenaza de que la guerra comercial se extienda con la imposición de aranceles por parte de China y la Unión Europea, las predicciones del aumento de la inflación o de una posible recesión son cada día más plausibles.

El propio mandatario estadounidense ha reconocido durante los últimos días que podría haber un periodo de "transición" dolorosa para los ciudadanos estadounidenses. A pesar de todo, sigue prometiendo que los aranceles conseguirán que regresen al país los puestos de trabajo que se trasladaron a terceros países con mano de obra más barata.

El banco más grande de EE.UU., el JP Morgan Chase, ha elevado la probabilidad de una recesión global del 40% al 60%.

Y, desde los parqués mundiales, las sesiones se cierran con fuertes altibajos. En el caso de España, el IBEX 35 cayó un 5,83% el viernes y un 5,12% el lunes, retrocediendo hasta situarse cerca de los 11.800 puntos. Sin embargo, este martes ha cerrado con una subida del 2,37% y ha recuperado la cota de los 12.000 puntos.

En Wall Street, el viernes pasado, los principales índices perdieron cerca de un 6%. Este martes, el Dow Jones de Industriales, principal indicador de la bolsa, cayó un 0,84 %, hasta las 37.645 unidades; el selectivo S&P 500 retrocedió un 1,57%, hasta los 4.982 puntos, y el tecnológico Nasdaq era el más perjudicado, bajó un 2,15%, hasta los 15.267 enteros.