Igualdad anuncia que se reformará el Código Penal para incluir la violencia vicaria
- La ministra ha instado, igualmente, a atender a las diversas formas de violencia vicaria, "no solo a la más extrema"
- El 016 es el teléfono de atención a víctimas, gratuito y no deja huella en la factura; el correo: 016-online@igualdad.gob.es


La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha pedido en el Congreso de los Diputados "definir expresamente" la violencia vicaria en el Código Penal para proteger a las víctimas de todas las conductas violentas que abarca, más allá de la más extrema, que es el asesinato.
Esta violencia, ha apuntado Redondo, provoca un daño moral y psicológico a las mujeres "de una magnitud insoportable". "Ninguna madre debería temer que sus hijos se conviertan en blanco de sus maltratadores. Ninguna infancia debería convertirse en escudo o moneda de cambio en un conflicto marcado por la violencia", ha dicho.
La ministra ha asegurado que "es preciso definir expresamente la violencia vicaria en el Código Penal, ya que no está recogido, y en la Ley Orgánica 1/2004 de medidas de protección integral contra la violencia de género". Estas declaraciones las ha efectuado en la Cámara Baja, en la Comisión de los acuerdos del Pacto de Estado en materia de Violencia de Género, donde ha presentado la "hoja de ruta" para dar una respuesta a la violencia vicaria, la digital y la económica.
Redondo ha precisado que la definición de este tipo de violencia de género no se limitará sólo a los hijos e hijas, sino que será amplia y abarcará también a los familiares "que pueden ser violentados como intento de dominación a la pareja".
Reconocer a las víctimas de violencia vicaria como víctimas de violencia de género
Además, Redondo ha llamado a reconocer en el ordenamiento jurídico a las víctimas de violencia vicaria como víctimas también de violencia de género. "Estamos trabajando precisamente en esta incorporación", ha avanzado. Igualmente, ha instado a atender a las diversas formas de violencia vicaria, "no solo a la más extrema". "Por ejemplo, hemos de atender también al ejercicio de violencia sobre hijos e hijas como consecuencia de la no alimentación adecuada, de que no se les lleve al colegio en tiempo y forma, o que se descuide su atención sanitaria o farmacológica", ha explicado.
Esta violencia, ha apuntado, provoca un daño moral y psicológico a las mujeres "de una magnitud insoportable". "Ninguna madre debería temer que sus hijos se conviertan en blanco de sus maltratadores. Ninguna infancia debería convertirse en escudo o moneda de cambio en un conflicto marcado por la violencia", ha dicho.
Detectar casos de violencia vicaria en procedimientos civiles de familia
También en el ámbito de la violencia vicaria, ha pedido avanzar hacia un sistema que permita detectar casos de violencia vicaria en procedimientos civiles de familia. Para ello, ha abogado por implementar protocolos especializados en violencia contra las mujeres en los puntos de encuentro familiar, garantizar la no aplicación del falso síndrome de alienación parental (uno de los progenitores está influyendo sobre el menor para mantenerlo lejos del otro sin una base real o justificada) o impulsar la formación especializada para profesionales de la justicia y operadores jurídicos, profesionales de servicios sociales o profesionales que tengan contacto con menores de edad.
Trabajando en la tipificación de la violencia económica
En cuanto a la violencia económica, la ministra ha expuesto que ya están "trabajando" en medidas que recoge el Pacto sobre este fenómeno. Así, se ha referido a la tipificación normativa específica de la violencia económica en el marco legislativo español. También al refuerzo de la vigilancia judicial sobre el incumplimiento de pensiones alimenticias y compensatorias, el diseño de mecanismos "ágiles" para el "embargo inmediato" de bienes y rentas en caso de impago reiterado de pensiones.
"Por ello, no basta con reconocer la violencia económica, debemos combatirla con voluntad política sostenida, con recursos suficientes y con los cambios estructurales y culturales necesarios. Porque sin independencia económica no hay posibilidad real de romper con el ciclo de la violencia ni de construir un futuro digno para quienes han sido víctimas", ha recalcado Redondo.
Preocupación por la pornografía en internet
Por otro lado, se ha referido a la violencia digital y ha tildado de "preocupante" la pornografía en internet. "Este acceso cada vez más frecuente y normalizado no solo expone a los menores a contenidos inadecuados para su desarrollo emocional y sexual, sino que también configura de manera distorsionada sus ideas sobre el consentimiento, la afectividad, el cuerpo y las relaciones interpersonales", ha expuesto.
En esta misma línea, ha precisado que el Ministerio ha "aprovechado" el proyecto de ley orgánica de protección de los menores en los entornos digitales, que ha iniciado su tramitación en el Congreso, para incorporar "buena parte" de las medidas suscritas en materia de violencia digital.
La ministra ha expuesto a los grupos que quiere que el traslado de las medidas del Pacto a las leyes se haga con el máximo consenso y ha adelantado que está dispuesta a negociar con los grupos parlamentarios la fórmula elegida para aprobarlas, ya sea mediante proyectos o proposiciones de ley.
Redondo ha asegurado que hay que trabajar con "urgencia", "consenso" y también con "seguridad jurídica" y se ha comprometido a que no se incorporarán medidas del Pacto a las leyes por la vía de "enmiendas incongruentes" en textos que nada tengan que ver con la violencia de género