Sánchez reivindica el Ingreso Mínimo Vital para combatir la desigualdad y pide compromiso a las autonomías

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado que el Ingreso Mínimo Vital (IMV) ha beneficiado a un millón de hogares y tres millones de personas en cinco años, de modo que esta "política innovadora" se ha convertido en "un faro de esperanza" que "está cambiando la vida de mucha gente". Por ello, ha pedido a las administraciones autonómicas que "no se desentiendan" de la lucha contra la desigualdad ni se escuden en las "competencias".

Así lo ha expresado este jueves durante su visita al centro de atención telefónica y telemática del Instituto Nacional de la Seguridad Social, con motivo del quinto aniversario de la puesta en marcha del IMV, "una conquista social para millones de personas de nuestro país". El IMV es "una impugnación frente a la indiferencia, un faro de esperanza para romper el círculo de la exclusión social y [una medida] que está cambiando a mejor la vida de mucha gente", ha apuntado el presidente.

Como ha indicado, en el último año los beneficiarios se han incrementado en un 30%, pero "hay que seguir" porque hay personas que no lo reciben por dificultades o por desconocimiento. Para solucionarlo, se están tomando medidas, como renovar la web de la Seguridad Social, ha apuntado.

También ha defendido que ha ayudado a reducir la tasa de pobreza hasta la más baja de la serie histórica (se situó en el 19,7% en 2024), así como la desigualdad, que también se encuentra en "su nivel más bajo". Sin embargo, ha señalado que "no podemos darnos por satisfechos" y hay que seguir trabajando y "perseverar en las políticas de redistribución de la riqueza".

Con todo, ha anunciado que en los centros de la seguridad social, a partir del 1 de junio, se ofrecerán servicios de atención telemática a personas con discapacidad auditiva, y ha destacado la labor del tercer sector, que "llegan donde nosotros no podemos llegar".